martes, 10 de marzo de 2009

SI YO FUERA MILLONARIO.....(El extremommovil)



Todo el mundo, hasta los más ricos, tienen ese “algo que harían si …”. Incluso los archirecontramillonarios poseen algún deseo o anhelo que esta sujeto a alguna condicionante que, por lo general, opera en función de algún recurso escaso y que casi en el 100% de las veces lo será el dinero. Por ejemplo, quizás Bill Gates quisiera tener el dinero necesario para crear o fomentar la riqueza que eliminaría la hambruna mundial no en un tan largo plazo, pero a pesar de todo lo que tiene, eso es algo que no puede obtener, porque su dinero no es suficiente para tan ardua tarea.

Pues mis deseos en el país del “si yo fuera…” no ascienden a ideales tan altruistas como el que le adjudico al amigo Bill, es más, el deseo en particular que mueve estas líneas es uno extremadamente social, o sea, es “social en extremo”, porque lo que verdaderamente quiero es convertirme en un extremista de las costumbres de la buena sociedad.

Me explico. Si el dinero me ofrece un verdadero excedente, es decir, si soy millonario y ya mis necesidades básicas y no tan básicas están resueltas hasta incluir a mi descendencia, pues haría algo que no muchos comprenderán. Como todo millonario, que quiere su Ferrari, su yate, sus villas, etc….yo quiero una cosa en particular: Un Extremomovil, ese para mi es “the ultimate luxury”.

Cómo imagino al extremomovil?, pues simple, es un vehiculo, para cuatro pasajeros, tipo carro, extremadamente blindado, con objetos punzantes colocados estratégicamente en lugares no visibles, que ante todo parezca un vehiculo “bien”, de lujo podría ser, pero que en su interior, es decir, bajo la carrocería, sea una verdadera arma contra el enemigo de las reglas del buen transito.

Como funciona el extremomovil? Pues más simple todavía, el extremomovil es un vehiculo para un ciudadano “Social extremo”, es decir, que viva vivir en sociedad, extremadamente, que es como yo quisiera vivir pero los medios me lo impiden. Una persona como yo en un vehiculo como el referido, sólo tendría que conducirlo tranquilamente y cumplir las reglas a como de lugar y sin importar las consecuencias, sólo eso, cumplir las reglas del buen transito y la satisfacción viene sola. Ejemplo, si usted va en su carril y un “!#$%&/ viene a metérsele sin direccionales pues siga su ritmo en su extremomovil, estréllesele, que el extremomovil hace el resto. Lo mágico es que usted siempre tendrá la razón, siempre que sea un verdadero “social extremo” ya que un “social extremo” siempre se conduce según las reglas del buen conducir, ese es su imperativo categórico.

Ay taxistas, concheros e imprudentes, si yo fuera rico!!!!!! Por ahora el extremomovil es sólo un anhelo pero llegará el día en que el este preparado para la batalla.

Lo grande del caso es que la mayoria de los concheros ya andan en sus extremomovil pero a la inversa, el de ellos le permite romper todas y cada una de las reglas del transito y además del vehiculo los ayuda su insolvencia para salirse con la suya.


P.S. Hay consideraciones legales del extremomovil que por cuestiones de espacio no las expongo pero igualmente van incluidas en la idea del “extremomovil”.

jueves, 5 de marzo de 2009

"DEI SITIO" AL PUEBLO Y DEL PUEBLO A LA CIUDAD



Los antropólogos y los sociólogos podrán tener las herramientas científicas que les indiquen los patrones necesarios para determinar si una determinada “comarca” eleva su estatus, es decir, si un paraje se torna en una sección y ésta última en pueblo y el pueblo finalmente en ciudad.


No creo que esto tenga mucho que ver con el número de personas que habiten el conglomerado, aunque creo que la cantidad de habitantes es la variable mas preponderante a la hora de otorgarle el renglón a un grupo de habitantes. Digo que la cantidad no incide en mi análisis porque cuantas “ciudades” en el fondo no son mas que pueblos, y cuantos pueblos se comportan como verdaderas ciudades??.


En fin, pensando el otro día di al traste con una variable con la que pueden ustedes determinar si donde viven es un paraje, una sección, un pueblo o ciudad; emulando a los humanos, podrían saber si su comarca, es un bebe en gestación, un infante, un adolescente o bien todo un adulto, todavía esta por verse cuando están los conglomerados en su envejecimiento o senectud.


La prueba es sencilla. Si en el mes de noviembre, no recuerdo con exactitud cual día, se sorprenden con ver harina y vestigios de huevos con cascarones tirados por doquier, entonces sepan que viven en un pueblo, si no saben por qué habrían de ver harina y huevos, pues es muy probable que ustedes no vivan en un pueblo y que se encuentren o bien en un pueblo en transición o en una ciudad en su sentido demográfico.


Así es, esa es mi prueba: huevos y harina; los mismos ingredientes con que se prepara un buen día de San Andrés, ahhh!! ahora lo recuerdan!?, pues sí, si en donde viven celebran esta fecha con la antigua usanza del huevo y la harina o incluso mas evolucionada con fundas de agua (o de orina), huevos güeros, naranjas podridas, etc, es casi seguro que usted reside en un pueblo o pueblecito de esta bella Quisqueya.


Les digo esto porque mi querida La Vega, “ciudad” culta y olímpica, hace ya un buen tiempo que dejo de ser una infante, paso la adolescencia y empieza a tornarse en adulta, y el primer síntoma que le veo es el abandono de los huevos y la harina en noviembre. No se confundan, no lo digo con alegría porque de verdad me da pena con la nueva generación que no sabrá lo maravillosas que fueron esas guerras de San Andrés, único día en donde las calles eran verdaderas trincheras, donde las casas eran fortalezas, donde el barrio o la zona se convertía en tu bandera y patria, y hacías todo lo posible por protegerla de los eventuales invasores con las armas que el día te propiciaba: huevos y harina.